La Extrañeza es un proceso escultórico-performativo-sonoro que involucra la colaboración de materiales encontrados. Con la filosofía de relacionarse con otros cuerpos desde una escucha permeable y presente, el movimiento se desarrolla con las texturas, sonidos, ritmos de cada objeto.

Permitiendo una libertad de significados y posibilidades, La Extrañeza es un juego, un experimento que pregunta, qué pasa cuando cambiamos las cosas de su lugar? La política contracultural y la estética ingenua se unen a una maquinaria feminista surrealista para transformar lo cotidiano y darle la vuelta a lo funcional.